¡La señora se esfuerza al máximo, pero semejante polla supera con creces la capacidad de su boca para tragar una polla! Debo decir que también le entra por delante, con un esfuerzo bastante palpable. Me pregunto, después de semejante gigante, ¿disfrutaría ella de una polla más pequeña?
Mientras observaba el juego lésbico de estas dos bellezas tetonas, me preguntaba todo el tiempo. A cuál de ellas elegiría si sólo me pidieran que eligiera una. Mi elección pasó de la pelirroja a la morena y viceversa. Al final, decidí que probablemente elegiría a la pelirroja. ¿Y tú?
Por lo visto, un coche deportivo tiene un poderoso efecto afrodisíaco en las morenas. Da igual que lo conduzca un negro musculoso o el típico hombre blanco, el brutal rugido del motor hace que las bragas de cualquier mujer que sepa de coches se humedezcan. Pero el negro también tuvo suerte en este caso: sus piernas se abren ante él con unas nalgas firmes, ¡uno de los espectáculos más bellos que recuerdo!